Ryan Reid está sola en la cama y se toca cuando decide contactar a Van Wylde para una foto de su polla. En cuestión de segundos, Van hizo algo mejor y llamó a la ventana de su habitación con su dura polla en la mano. Kaden Kole, la nueva madrastra de Ryan, entendió su plan. Cuando vio la polla de Van, quiso un poco para ella. Kaden envía al padre de Ryan para arruinarle la diversión y Van escapa justo a tiempo. Insatisfecha, a Van se le ocurre un plan para conseguir el orgasmo que se merece haciendo un agujero glorioso en la bolsa de entrega y apareciendo en la puerta para sorprender a Ryan. Kaden no se deja engañar fácilmente y entra en acción, enseñándole a Ryan sus formas de hacer el amor en un trío sucio.